El mundo al otro lado del espejo.

26.3.11

Cry

Nena, deja de llorar. No merece la pena.
Mañana te despertarás y el llanto pertenecerá al pasado. Ni siquiera lo recordarás.
Puede que la apatía siga anidando en tu cuerpo, pero eso no quita que pueda cambiar.

Pero Naia seguía acurrucada, mirándola con los ojos llorosos y esa cara de pena que se le pone cuando siente que se le han ido las fuerzas. Aunque lo único que consigue es que Anne sonría, porque se parece más al berrinche de una niña de apenas cinco años. Y entonces Naia se enfurruña más, intentando parecer mayor, hasta que se le olvida porqué estaba triste.



Las flores ya están creciendo.

1.3.11

... que se han muerto en los portales

Ruk ya ha plantado (algunos de) sus Nomeolvides. Y, como de costumbre, Naia se ha puesto celosa.

Así que un señor muy majo y muy guapo le ha regalado una macetita para ella sola, con mariposa incluida, y se le ha pasado todo.



Sólo quería asomarme al hueco ese que deja el silencio, pero no el silencio de cuando estás con alguien e intentas comprender su idioma de miradas perdidas, si no el otro, el feo, el que sientes gris y pesado como una losa, una losa tan larga como dos largas semanas que se transforman en un mes; un silencio tan largo e insignificante que hace que tu mente te insinúe "¿y si es uno de esos silencios para siempre...?"