El mundo al otro lado del espejo.

26.3.10

Anne.


La noche estaba tranquila.
Le sorprendió ver estrellas en el cielo de ciudad.

Dio un par de caladas más al cigarrillo y sintió que se mareaba. Se apoyó contra la pared y terminó de apurar la colilla.
Le temblaban las piernas, así que se sentó y echó la cabeza hacia atrás, viendo las nubes pasar rápidamente y dejando que el suave frío le acariciara el rostro.
Cerró los ojos y respiró hondo.

De pronto, todo comenzó a dar vueltas. Empezó a reírse sin motivo aparente, con un deje de histeria, hasta que se levantó y decidió volver a entrar en casa.

Se encontraba francamente mal; la angustia se apoderaba de su estómago mientras un sudor frío le recorría todo el cuerpo.
Se fue deprisa al baño y, como era de esperar, vomitó en el lavabo, sujetándose el pelo con una mano y echándose agua con la otra.

Una vez calmada y limpia, levantó la vista hacia el espejo y se miró a los ojos.


"¿Quién eres tú...?"

22.3.10

Regreso.


Ruk ha vuelto.

No ha querido decirnos dónde se había metido.

Era de noche, muy muy tarde, y trajo consigo llanto y migraña, junto a una melena indomable y unos ojos que parecían querer cerrarse para no abrirse más a la cruda realidad.

Intentó dormir, pero no pudo.
Se sentó, a esperar el amanecer con las gafas puestas.

Ni una palabra, no dijo ni una palabra.


A veces te das cuenta de que todas esas palabras están vacías, ya que no se reflejan en los actos.
A veces, cuando das un voto de confianza, eres decepcionado.
A veces, creyéndote fuerte, te hundes más de lo esperado.

Tenía fe en que esta vez fuera diferente.
Pero me habéis demostrado lo contrario.

1.3.10

Puedo decirte porqué ella se sintió así...

Se sentía así todos los días.
Y yo no podía ayudarla.

Sólo la vi cometer los mismos errores una y otra vez.


Y, después, todo se tornó gris.