El mundo al otro lado del espejo.

1.3.11

... que se han muerto en los portales

Ruk ya ha plantado (algunos de) sus Nomeolvides. Y, como de costumbre, Naia se ha puesto celosa.

Así que un señor muy majo y muy guapo le ha regalado una macetita para ella sola, con mariposa incluida, y se le ha pasado todo.



Sólo quería asomarme al hueco ese que deja el silencio, pero no el silencio de cuando estás con alguien e intentas comprender su idioma de miradas perdidas, si no el otro, el feo, el que sientes gris y pesado como una losa, una losa tan larga como dos largas semanas que se transforman en un mes; un silencio tan largo e insignificante que hace que tu mente te insinúe "¿y si es uno de esos silencios para siempre...?"

2 comentarios:

Dímelo.